Pasemos ahora a tratar, la relación directa, que estas prácticas
tienen con las maldiciones generacionales y que afectan a familias
enteras, como también a individuos que sinceramente buscan hacer la
voluntad de Dios.
A cuantos cristianos sinceros conocemos que asisten regularmente a la
iglesia y se esfuerzan con todo su corazón por vivir en santidad… y sin
embargo sus esfuerzos parecen condenados al fracaso, vez tras vez. Nada
parece salirles bien.
O por ejemplo, escuchar algo como esto: "mi vida marchaba muy bien
hasta que acepté a Jesucristo… ¡luego todo lo malo que podía pasarme, me
pasó!”.
Sí, es cierto, puede estarle pasando a usted hoy. Mú
...
Leer más »